Hacia el Sur, Granada (II)

LOS FESTIVALES DE CINE EN ESPAÑA: Granada

Un festival con pocos años pero muy resultón

Escribe: Mister Arkadin

Toda la ciudad de Granada estaba repleta de carteles rojos anunciadores del certamen. Era imposible recorrer los alrededores de la catedral, y no sentir latir el certamen. En una de sus notables plazas, la de Big-Rampla, donde las terrazas de los restaurantes compiten con la de una estupenda heladería (Granada es una ciudad abundante en ellas) fundada a principios del siglo XX. Allí se asentaban las diferentes carpas en las que tuvieron lugar los diversos talleres (animación, vídeo, fotografía, interpretación…) celebrados a lo largo de los días que duró el certamen. Junto a ellas otra carpa más se abría como punto de encuentro. Entre ellas y por otros sitios de la ciudad andaban, informaban o correteaban los cientos de voluntarios que ayudaban al funcionamiento del certamen. Somos `muchas´ más que `muchos´. Sus rojas camisetas eran un claro reclamo ―e invitación― para que cualquiera se informara sobre las múltiples actividades de cines del sur. Casi siempre contestaban a cualquier pregunta que se les hiciese aunque, en algunos casos, alguien empezaba a carraspearse, ponerse nerviosa/o, o enmendar los cerros de Úbeda si no daban con la respuesta.

Probablemente los ecos del festival no asciendan por las estrechas y pintorescas calles del Albaicín separado, de la grandiosos recintos de La Alambra, por el cauce (prácticamente inexistentes) de uno de los dos ríos que circunvalan la ciudad. Es comos si la belleza típica de una zona tratara de reflejarse en la monumentalidad de la otra. Nada mejor que ascender hasta el mirador de San Nicolas para “beberse” la Torre Veleta, que proa de los monumentos nazaris, esconde en su interior los variados tesoros monumentales.


Inauguración y clausura

proyección de inauguración, en el Patio del Palacio de Carlos V
Fue allí en la zona de la Alhambra, donde tuvo lugar la inauguración y la clausura del festival. Se inició en el Patio del Palacio de Carlos V, antes que en su recinto sonara la música, el canto y el baile de las jornadas de Música de Granada. Se cerró el festival en el Palacio de las Aljibes, punto de entrada al gran palacio árabe.

En la inauguración hubo música, película y homenaje al actor Omar Sharif. Entiendo el homenaje, como hizo el certamen, a un director del `sur´ como es Souleyman Cissé, pero no el homenaje (recuerdo, o vaya a saber qué) al co-protagonista de Lawrence de Arabia. Ni hoy tiene ningún tirón, ni nunca llegó a ser un actor de primera fila. No hace falta vender Cines del Sur con ese reclamo. En sí mismo, el certamen ya es tiene bastante solidez.

Souleymane Cissé, premio Alambra de Honor 2009
La clausura, sobria, simple, tubo lugar en un lugar de ensueño, en una noche calurosa como las que vivió Granada durante los días del Festival. Una película mexicana, Arráncame la vida, bajo el telón de un certamen que en tan sólo tres años se consolida como uno de los (festivales) de segunda (de Champions hay uno, para contar los de primera sobran los dedos de una mano; los segunda no son muy numerosos; los que más abundan, entre los cerca de trescientos repartidos por España, son los de tercera categoría y los de regional) más importantes que tienen lugar entre nosotros. Su asentamiento en un cine diferente y desconocido puede ser peligroso para la aceptación popular, pero no lo es en cuanto opta por una temática novedosa.


Los números cantan

Espacio `Pantalla abierta´
Quizá haya gente de Granada que no sepa de la existencia del festival, que se pregunte que hacen esas carpas diseminadas por calles y plazas. Los habitantes de la ciudad, desde luego, no se asombrarán, están habituados a ello, al ver que por la ciudad deambulen personas de diferentes procedencias. Ni se plantearán las razones. Pero si por las noches se encuentran en el centro de la ciudad, se toparán con algo distinto: las proyecciones (repletas) al aire libre que tienen lugar en sitios emblemáticos, de títulos en diferentes (y poco comunes) idiomas y, claro, con subtítulos en castellano.

Apunten estos datos. En los días que ha durado el certamen (siete días, uno menos que el pasado año) más de 15.000 personas han acudido a las salas donde se han llevado a cabo las actividades del certamen. Ello supone un incremento de asistencia del 12,5% respecto al pasado año.

Por lo que se refiere a proyecciones de películas, hay que decir que se han pasado cerca de cien títulos de los cuales unos setenta han sido estrenos en España.

Presentación de `Intrusos en el paraíso. Los cineastas extranjeros en el cine cubano de los sesenta´, con (izda-dcha) Juan Antonio García Borrero, Casimiro Torreiro y Margarita Alexandre
Entre los nuevos espacios abiertos al Certamen hay que citar el Pabellón Al-Andalus y la Ciencia y el centro cultural Caja Granada. En un total de diez lugares se han proyectado películas, tres de ellos abiertos a las sesiones nocturnas al aire libre.

`En Escena´: taller de animación, con Rocío Huertas
El número de actividades llevadas a cabo durante la semana ha sido de 18: seis talleres, ciclo de diálogos interculturales, presentaciones y reuniones de diferentes programas de ayuda para el desarrollo, producción y promoción de este tipo de cine y diversas mesas redonda. Hay que sumar a lo anterior, tres exposiciones organizadas en colaboración con otras entidades.

Todo ello ha sido posible gracias a la ayuda de los 150 voluntarios con los que ha contado el certamen.

Taller de Live Cinema, proyección de fotoilustración en las calles de Granada
Como prueba del interés que despierta Cines del Sur, sirva el hecho de que su web, viva, cambiante por horas, tal como debe ser, contabilizó durante los días de la celebración del certamen casi 25.000 visitas con más de 1.500.000 accesos.

Se dice que en Granada todo es posible, que por allí puede aparecer Zoraida, Isabel o Fernando, cualquier miembro de la dinastía nazarí o, incluso, Washington Irvin pergeñando nuevos cuentos. Es cierto, puedo dar fe de ello. Nada más llegar a la ciudad, y en un paso de peatones, una joven se acercó a Adolfo: “tú has sido profesor, ¿verdad? Si es así he sido alumna tuya en Valencia”. Y era verdad, la ex-alumna, preocupada por cuestiones audiovisuales (¿quién la habría iniciado en el interés por el mundo de la imagen?) iba a una de las sesiones del certamen. Llevaba en Granada, donde vivía desde hace unos años, unos proyectos sobre el mundo de la comunicación. La ciudad le había tentado a través del flamenco. A sus sones había acudido desde la tierra de las flores en busca de cumplir sus sueños. Y allí valencianos, emigrados y visitantes, se encontraban charlando bajo el sol abrasador de la preciosa ciudad granadina.

web Festival de Granada

web Encadenados
Cobertura del Festival de Granada, Cines del Sur, en

avance, inicio, actividades, palmarés, balance

Comentarios

  1. No esá mal el número total de espectadores, teniendo en cuenta la (difícil) especialidad del certamen.
    Alicia

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  2. Quizás en Granada hay más entusiasmo que en otros sitios y con menos dinero hacen más. Granada siempre será Granada.
    Saludos cordiales y buen verano.

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